Imagina que pudieras conocer la historia detrás de cada botella de vino que produces. Saber de qué parcela proviene cada uva, qué camino ha seguido desde la viña hasta la botella y quién ha intervenido en cada paso. Eso es exactamente lo que te permite la trazabilidad en bodegas.
En este artículo, vamos a descubrir por qué la trazabilidad es mucho más que un requisito legal. Es una herramienta clave para garantizar la calidad de tu vino, prevenir problemas y generar confianza en tus clientes. ¿Quieres saber cómo implementarla en tu bodega? Sigue leyendo.
En pocas palabras, la trazabilidad es la capacidad de rastrear el recorrido de un producto a lo largo de toda la cadena de producción. En el caso de una bodega, hablamos de seguir el rastro de la uva desde el viñedo hasta la copa.
Pero vamos a ser más precisos. En el mundo del vino, distinguimos dos niveles de trazabilidad:
Un buen software de trazabilidad bodegas, como el de Isagri, te permite tener la trazabilidad completa del flujo de producción y la procedencia de cada lote de vino con un árbol interactivo como el que ves a continuación.
Antes de entrar en los beneficios, vamos a aclarar una cosa: la trazabilidad no es opcional, es obligatoria por ley. Tanto la normativa de trazabilidad europea (Reglamento CE 178/2002) como la española te exigen que tengas un sistema para identificar a tus proveedores y clientes y establece los requisitos mínimos que toda bodega debe cumplir.
¿Qué implica esto en la práctica? Básicamente, que debes llevar registros de:
Además, si elaboras vinos ecológicos o amparados por una Denominación de Origen, tendrás que cumplir requisitos adicionales de trazabilidad para garantizar que se respetan las normas específicas.
¿Y cómo se audita todo esto? Pues depende del tipo de vino y de tu mercado, pero en general debes estar preparado para recibir inspecciones de:
Los inspectores también verificarán si cumples con la normativa de etiquetado del vino, sobre todo si exportas.
Por eso, cada vez más bodegas están pasando de la trazabilidad en hojas de cálculo a sistemas digitales que permiten tener toda la información ordenada y accesible. Pero vayamos por partes.
Veamos un ejemplo concreto para entender mejor cómo funciona la trazabilidad en el día a día de una bodega.
Imagina que hoy recibes 10.000 kilos de uva tempranillo de una de tus parcelas. Lo primero que haces es registrar esa entrada en tu sistema:
Esos 10.000 kilos entran en la bodega y se convierten en el lote "T-15092025". A partir de ahí, ese código te acompañará durante todo el proceso:
En cada paso, vas registrando qué se hace con ese lote (análisis, trasiegos, coupages...) y quién interviene (operarios, enólogos, responsable de calidad...).
Así, si en algún momento detectas un problema (por ejemplo, un cliente te devuelve una botella con un tapón defectuoso), puedes "tirar del hilo" y rastrear exactamente:
Esa capacidad de reaccionar rápido ante cualquier incidencia es fundamental para evitar que un pequeño problema se convierta en una crisis de mayores dimensiones. Y solo es posible con un sistema de trazabilidad eficaz.
Este es el caso de Bodega Numanthia, donde han pasado de un sistema tradicional —en el que toda la información se recopilaba y analizaba a posteriori— a un modelo digital en el que todo el trabajo queda registrado al instante, en tiempo real. Esto les permite tener una visión actualizada y precisa de todo lo que ocurre en bodega, y una agilidad total a la hora de responder ante cualquier reclamación relacionada con trazabilidad, costes, stock o la situación de un lote determinado. “Si no lo hiciéramos así, perderíamos muchísimo tiempo en sacar informes o entender realmente qué está ocurriendo”, afirman desde la bodega.
Ahora que ya hemos visto cómo funciona la trazabilidad en el día a día, vamos a hablar de las herramientas que pueden hacerte la vida más fácil.
En el mercado existen programas especializados en gestión vitivinícola, también conocidos como ERP (Enterprise Resource Planning) para bodegas. En este contexto, los software de trazabilidad en bodegas tienen módulos específicos para controlar la trazabilidad, desde la entrada de uva hasta la facturación.
¿Qué ventajas los software de trazabilidad en bodegas frente al papel o al Excel? Muchas:
Estos programas suelen tener módulos específicos para:
Además, se integran con otras tecnologías que pueden hacer tu trazabilidad aún más potente:
No hace falta que digitalices todo de golpe. Puedes empezar por los procesos más críticos (recepción de uva, embotellado, logística...) e ir ampliando poco a poco. Lo importante es dar el primer paso.
Ya hemos visto que la trazabilidad es obligatoria por ley. Pero cumplir la norma es solo el punto de partida. Tener un sistema de trazabilidad robusto y bien gestionado puede darte una ventaja competitiva en varios frentes:
Y por el contrario, una trazabilidad deficiente puede traerte dolores de cabeza:
⚠️ Sanciones por incumplimiento legal
⚠️ Pérdidas económicas por retiradas de producto
⚠️ Daños reputacionales por problemas de calidad
⚠️ Peor acceso a ayudas y subvenciones
⚠️ Menor eficiencia y control de tus procesos
Si has llegado hasta aquí y te has dado cuenta de que tu bodega tiene deberes pendientes en materia de trazabilidad, no te agobies. Nunca es tarde para ponerse al día. Y no hace falta que lo hagas todo de golpe
El primer paso es hacer una radiografía de tu situación actual:
A partir de ahí, traza un plan de acción priorizando lo más urgente:
Y sobre todo, no lo veas como un trámite burocrático, sino como una oportunidad para hacer las cosas mejor. Con cada registro que añades, estás construyendo un activo de valor para tu bodega.
Merece la pena el esfuerzo de invertir en un buen software de trazabilidad para bodegas. Más que un gasto, es una inversión en el presente y el futuro de tu bodega.
Si tu bodega aún tiene camino por recorrer, no te desanimes. Empieza por asegurar el cumplimiento legal, céntrate en tus puntos críticos y ve dando pasos hacia la digitalización. Y si necesitas ayuda, busca asesoramiento especializado. El sector vitivinícola tiene soluciones cada vez más adaptadas a las necesidades de cada bodega.
Y si tienes cualquier otra duda sobre trazabilidad, no dejes de consultarnos. En Isagri, llevamos años ayudando a bodegas como la tuya a producir vinos de calidad, con todas las garantías y la máxima eficiencia. ¿Hablamos?
No, la legislación no exige que la trazabilidad sea digital. Puedes llevar los registros en papel siempre que cumplas con la información mínima requerida. Pero ten en cuenta que, a medida que tu bodega crece, gestionar todo en papel se vuelve más complicado.
La trazabilidad es una herramienta para seguir el rastro de un producto a lo largo de la cadena de producción. La certificación de calidad es un sello que acredita que tu sistema de trazabilidad (entre otros aspectos) cumple con ciertos estándares. Además, la trazabilidad está muy relacionada con el correcto etiquetado del vino, ya que ambos forman parte de los estándares exigidos.
Sí, especialmente si estás empezando o tienes una bodega pequeña. Un Excel bien estructurado puede ser suficiente para registrar entradas, salidas, elaboraciones, etc. El reto es mantenerlo actualizado y ordenado a medida que tu actividad crece.
Depende del tipo de vino que produzcas y de dónde lo vendas. Lo habitual es que te puedan inspeccionar:
Si se detecta un problema y no puedes demostrar la procedencia del vino, estarías incumpliendo la normativa de trazabilidad, con las consecuencias que ello implica: